La tarea se enmarca en el control de calidad de la edición de texto la cual, en principio, parece ser tan simple… aunque la misma expresión del concepto lleva a pensar, más de una vez, en cómo abordarla y desarrollarla para alcanzar un nivel óptimo.
La revisión de un texto debe permitir, incluso, una autocrítica permanente de quien la lleva adelante, para eliminar defectos de redacción, errores gramaticales, impropiedades léxicas y rasgos no genuinos de la lengua empleada. Evaluar si el emisor o autor del texto ha conseguido expresar y redactar sus ideas con la claridad necesaria para que el o los receptor/es puedan comprenderlas con facilidad o, si no es así, realizar y/o sugerir las correcciones que lo ameriten.
La uniformidad es una línea de trabajo que se utiliza, esencialmente, en los textos tipográficos. Sin embargo, debe tomarse como una herramienta imprescindible en la elaboración de productos donde la tecnología actual tiene una fuerte presencia ya que, no por ser novedosos, la lectura de los textos y los lectores de estos segmentos requieren que la obra tenga el mismo nivel de calidad que la impresa.
Sé que es común oír pensamientos acerca de que la escritura digital es diferente a la gráfica. Sin embargo, cada día que pasa me permite observar que los requerimientos de empresarios y lectores vuelven al cauce habitual de una buena obra para poder leerla.
El hecho de haber estudiado Comunicación Social, haber participado en talleres literarios creativos, haber formado parte de equipos que lograron productos literarios físicos y ahora digitales, como así también tener libros editados - físicos y digitales - me permiten aquilatar toda esa experiencia y ponerla al servicio de quien, como usted, lo solicita.
En caso de ser seleccionado para esta tarea, me permito sugerir una comunicación fluida luego de cada entrega parcial e, incluso, total, de manera tal de intercambiar opiniones y que el resultado final este en consonancia con la línea de trabajo que propone.
Cordialmente, Omar Lillardo Alonso